El Ayuntamiento de Moraleja ha dejado ya de beneficiarse de unos diez servicios dirigidos a los ciudadanos después de que la Mancomunidad Sierra de Gata decidiera expulsar al consistorio moralejano tras no abonar éste la deuda de 1,5 millones de euros que desde hace más de un año tiene contraída con dicha mancomunidad. Las primeras consecuencias de esta separación, que se hizo efectiva en octubre, empiezan ahora a sufrirlas los vecinos del municipio que han visto cómo la Casa de Oficios que estaba prevista ponerse en marcha en el municipio ya se ha trasladado a Cilleros. Dicho centro permite impartir dos cursos formativos para treinta alumnos en la especialidad de electricista y acabados de construcción y a los cuales ya no tiene acceso ningún moralejano, explicó el presidente de la mancomunidad, Alfonso Beltrán.

Desde este mes, los moralejanos tampoco disponen de los beneficios del Parque de Maquinaria, del Taller de Empleo de la Junta, de las acciones y proyectos relacionados con las Nuevas Tecnologías, del Plan de Desarrollo Turístico, ni de los técnicos de la Oficina del Area de Rehabilitación Integrada, de la Oficina Urbanística y de Igualdad. Además, se han suprimido el Plan Especial de Empleo y los monitores deportivos que tenía destinados la mancomunidad.