Navalmoral volvió ayer a reestablecer el suministro de agua a Peraleda de la Mata, Belvís de Monroy, Millanes de la Mata y Valdehúncar tras la suspensión decidida el pasado martes por los responsables municipales moralos y la empresa concesionaria del servicio, Urbaser.

A pesar de que en un principio se estimaba que el corte a las poblaciones vecinas durara hasta el sábado o el domingo, se decidió adelantar el suministro a ayer por la mañana "porque ya había agua en el depósito de cola, que es de regulación y el que facilita la impulsión, a pesar de que el depósito principal no está lleno", según relató José D. Pascual, primer teniente de alcalde moralo, siguiendo las explicaciones de los técnicos de Urbaser.

El corte de agua a estas cuatro poblaciones, que se abastecen directamente de Navalmoral, se decidió porque el suministro a la cabecera de comarca corría peligro debido a la bajada del nivel de los depósitos ante los cortes ocasionados por continuas averías; incluso la última rotura secó finalmente el tanque y gran parte de Navalmoral se quedó sin agua durante unas horas.

La situación de la falta de suministro se ha vivido de manera dispar en los cuatro municipios, siendo el caso de Millanes el más dramático al no tener reservas ni fuente alternativa.