El Ayuntamiento de Navalmoral está a la espera de recibir una respuesta positiva del Ministerio de Justicia para construir los calabozos en las nuevas dependencias de la policía local, que se ubicarán en el antiguo colegio de ´las monjas´.

Según explicó el alcalde moralo, Rafael Mateos, al subdelegado del Gobierno en Cáceres, Fernando Solís, durante su visita a las obras del Plan E hace unos días, el consistorio envió una carta al Ministerio a finales de julio. En la misiva se solicitaba información sobre las características que deben tener los depósitos de detenidos y sobre cómo se iba a financiar su construcción, ya que es dependencia del Ministerio. De momento, casi un mes después del envío de la carta, el consistorio moralo no ha obtenido ningún tipo de respuesta. Si la situación persiste, los calabozos no se construirán y Navalmoral no tendrá ningún espacio para las personas que sean detenidas tanto por los agentes de la policía local como por la Guardia Civil de la localidad.

Ahora mismo, todos los detenidos son custodiados por los agentes de seguridad local, a pesar de no ser tarea de su competencia, en el sótano de sus actuales dependencias, un sitio con fecha de caducidad cercana. Por tanto, si no existe comunicación por parte del Ministerio de Justicia indicando cómo se financiará la construcción, las nuevas dependencias policiales no tendrán este espacio habilitado. De este modo, Navalmoral se quedará sin calabozos porque tampoco lo tienen los dos cuarteles de la Guardia Civil ni los Juzgados, por lo que los detenidos tendrán que ser trasladados a otras localidades cercanas pero más pequeñas, como Casatejada o Talayuela, donde sí se custodia a los detenidos.

Las obras de adecuación del antiguo centro educativo de la localidad para dependencias municipales, que se están financiando con fondos del Plan E del Gobierno central para fomento del empleo, finalizarán el próximo mes de septiembre, según estima la constructora Gopersa.

Además de la nueva Jefatura de la Policía Local, habrá una cocina para el servicio de comidas que pondrá en marcha Cáritas en otoño; dos pistas de pádel; y varias salas y despachos multiusos; sin olvidar el salón de actos que se usa desde hace unos meses. Una vez el consistorio recepcione las obras se irá dando uso a unas dependencias que fueron compradas por 750.000 euros a principios de 2008, el patrimonio más grande jamás adquirido por el ayuntamiento moralo.