Diecinueve alumnos de 2 años del centro infantil Zarapico de Casar visitaron el pasado mes una granja escuela con el fin de que vivieran una experiencia nueva en el ámbito rural y de la naturaleza, al tiempo que se favorecía el aprendizaje mediante la observación y la exploración.
Así, los niños participaron en varios talleres, dieron de comer a las gallinas, patos y tortugas, recogieron flores y limpiaron y montaron a caballo, dieron de comer a las ovejas y vieron cómo se ordeñan y jugaron al aire libre, entre otras actividades.
El balance es que "ha sido una experiencia positiva y muy satisfactoria para los niños y para los educadores", dijo una de las educadoras del centro infantil organizador de la jornada, que contó con la colaboración del ayuntamiento y de los padres.
