Más de 300 escolares del Centro Rural Agrupado Almenara de Sierra de Gata llenaron de color los montes del término de Torre de Don Miguel. Los estudiantes, con edades comprendidas entre los 3 y 15 años, participaron en una actividad de reforestación que ha inundado de verde esperanza una de las zonas próximas al paraje La Lobera, arrasado por un incendio el pasado septiembre.

"Es una idea fabulosa porque los escolares y también los maestros aprendemos la importancia de cuidar el medio ambiente en convivencia con alumnos de otras localidades de la comarca", explicó Jacinta Moreno, maestra del colegio de Gata.

La cita, organizada por la Fundación Global Nature y la Consejería de Desarrollo Rural, ha permitido cubrir con un manto de especies autóctonas una superficie que oscila entre las siete y diez hectáreas. Se han semabrado casi 3.000 plantas cedidas por la Dirección General de Medio Ambiente. "Es emocionante observar como hasta los niños más pequeños han trabajado para cuidar la naturaleza", añadió Miguel José González, de la Fundación Global Nature.

Maestros como Juan Agustín Camisón, de la escuela pública de Torre de Don Miguel, confiaron repetir la experiencia "porque no es la primera vez que el colegio participa en actividades medioambientales y para nosotros es fundamental que los escolares conozcan las nefastas consencuencias de los incendios", afirmó. Los participantes trabajaron duro toda una mañana en la que, bajo un cielo azul, fueron llenando de pequeños plantones los agradecidos montes de Torre de Don Miguel. "Es la primera vez que participamos en una actividad de este tipo y ha sido totalmente satisfactoria", opinó Juan Antonio Domínguez, maestro del colegio de Cadalso. Ahora, los niños del Centro Rural Agrupado Almenara seguirán mimando los arbustos y periódicamente limpiaran los alrededores para garantizar el crecimiento de un nuevo manto verde en Sierra de Gata.