Con una extensión de 90,5 kilómetros cuadrados, Oliva de Plasencia se sitúa en la depresión de los ríos Ambroz-Alagón, al pie de las montañas de Trasierra. El clima del que gozan sus vecinos es del tipo mediterráneo subtropical con influencias de montaña con una temperatura media anual de 16,5 grados centígrados.

Además, sus entornos presentan un bosque esclerófilo mediterráneo, con abundancia de encina y matorral, mientras que la vegetación que más abunda son los castaños, robles y alcornoques, junto a otras especies de matorral como brezo, madroño, tojo.

La distribución del sector productivo está encabezada por el agrario que ocupa a más del 50% de la población activa, seguido del industrial y la construcción, y del de servicios, que da trabajo a un 36% de los habitantes de Oliva, en la que la ganadería tiene una presencia destacada.

LA IGLESIA DE SAN BLAS

Del patrimonio artístico de la localidad sobresale la parroquia de San Blas, edificio renacentista construido a base de sillería granítica y mampostería. Conserva una notable torre de tres cuerpos en los pies del templo. Entre otros elementos destaca un arco triunfal que permite el acceso al presbiterio plano, cubierto con un artesonado octogonal sobre trompas, con labor de lacería.

Mención aparte merece el palacio de los Condes de Oliva, que no se encuentra en optimo estado de conservación y que fue construido en el siglo XVII. La casa nobiliaria a la que perteneció logró el título de Felipe IV, que se lo concedió el 17 de julio de 1623 a Rodrigo de Aranda, embajador en Venecia y Caballero de Santiago. El 23 de noviembre de 1983 se expidió una carta de sucesión a favor de Felipe Vargas-Zúñiga de la Calzada, casado con María Dolores Ceballos-Zúñiga y Santos.

Nobleza al margen, y partiendo de Plasencia, Oliva de Plasencia es un buen lugar para iniciar un recorrido por la comarca, estratégicamente situada como cabecera de ruta por el valle del Ambroz, cercano al puente romano de Cáparra que salva el curso de las aguas del río Ambroz entra la calzada romana en esta mansio , sirviendo el camino como eje organizador del urbanismo del conjunto así como de linde entre dos términos municipales, por una parte Guijo de Granadilla y por otra Oliva de Plasencia. Este enclave es muy interesante y espectacular, destacando sobre todo el conjunto la monumentalidad del arco de Cáparra, así como las recientes excavaciones arqueológicas llevadas a cabo dentro del Proyecto Alba Plata, que incluye la creación de un albergue turístico en una casa popular en el municipio de Oliva de Plasencia que está muy próximo a las ruinas romanas.