Treinta conductores estuvieron paralizados durante más de una hora en las instalaciones de la ITV, ya que no les podían atender porque no disponían de folios para imprimir los resultados de las observaciones de las revisiones periódicas. Ayer estaban citados 107 conductores, y a las nueve y media, hora a la que llegaron las existencias de papel, debían haber sido revisados más de treinta vehículos.
La persona encargada de proveer de papel a la ITV es el jefe de Sección de Asuntos Económicos, que depende del consejero de Infraestructuras y Desarrollo Tecnológico de la Junta de Extremadura. Este cargo debe suministrar todo el material fungible a la provincia de Cáceres, que estaba solicitado desde el pasado mes de enero.
Los conductores se quejaban del mal funcionamiento de la administración y del trastorno que les ocasiona, ya que muchos habían tenido que pedir permisos en sus trabajos para poder acudir a la ITV. Otros se habían desplazado desde Candeleda, Aldeanueva de la Vera o Talayuela y tuvieron que volver sin ser atendidos.
