Pedro Castañera, un jubilado de Losar de la Vera, está empeñado en convertir su finca La Jarilla , ubicada a pocos metros de la garganta Vadillo, en una obra de arte con las ramas inservibles de los árboles que cultiva. Unas veces adapta los brotes que no son vitales para las plantas en cayadas que pasan a tener formas originales y en otras ocasiones usa los desechos de las podas para crear bastones con raras y sugerentes formas.

El mundo animal también ocupa un lugar destacado entre las figuras que realiza Castañera. "Es una buena terapia y resulta muy relajante dar forma a los desechos de las plantas, además de servir para dar utilidad a una materia, que de otra manera pasaría automáticamente a ser utilizada para la lumbre, para algo inservible", indica el autor.

Entre las cayadas más curiosas , "tengo esta denominada ´del diablo´, por llevar incorporado el tridente con el que normalmente se representa Lucifer", explica el autor de las obras señalando una de ellas. Otra, un conjunto de figuras que son un monumento a los malos tratos. "Lo componen siete animales en actitudes que llevan a pensar al observador que se están diciendo que para vivir bien tenemos que olvidar todo tipo de violencia", y añade, "sin olvidar que para luchar contra esta lacra social es necesario tener en cuenta que la unión hace la fuerza".

Castañera expuso el año pasado sus obras en Losar y ante el éxito de público, está dispuesto a repetir la experiencia allí o en algún otro pueblo del entorno. "Si me lo piden allí estaré", apostilla.