El norte de la provincia cacereña podrá acceder a la A-66 hasta Cáceres por una carretera más amplia a partir de septiembre tras la apertura de un tramo de 12 kilómetros, el primero de los tres sobre los que se trabaja para acondicionar la Ex-109 de la N-630 al límite de la provincia de Salamanca por Coria y la vía rápida desde el cruce de Portaje hasta la A-66, en el Puerto de los Castaños. Así lo confirmó ayer el consejero de Fomento, José Luis Quintana, antes de visitar algunos de los recorridos donde se ejecutan las obras con un presupuesto de 10 millones de euros.

Los tres tramos tienen 18.080 metros de longitud y contarán con una calzada de 10 metros de ancho, de los cuales tres se destinarán para arcenes. Los usuarios, unos 4.000 diarios según las previsiones, podrán hacer uso en breve de este primer tramo considerado el más importante por la Junta. "Este tramo tiene prioridad debido a que supone la conexión de la zona noroeste de la provincia con la autovía", explicó Quintana. Los otros dos tramos hasta el cruce de Portaje estarán acabados este año.