El Puente romano de Alcántara, construido en tiempos del emperador Trajano, en el siglo II después de Cristo, se erigió sobre los restos de otro puente más antiguo, según un estudio publicado en Arqueología de la Arquitectura. La investigación, en la que han participado científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), confirma la importancia estratégica de este lugar, y la necesidad de grandes infraestructuras públicas.

El Puente de Alcántara «está considerado como uno de los símbolos de la romanización de Hispania y una de las obras maestras de la arquitectura de todo el mundo romano», según ha explicado a Efe el investigador del Instituto de Arqueología-Mérida, Antonio Pizzo.

El hallazgo se ha producido en una de las pilas del puente, situada en la margen izquierda del río, donde «se ha evidenciado la presencia de parte de un puente anterior que permanece visible y que fue reutilizado en la estructura de época de Trajano».

Se trata de una evidencia que confirma la idea de que el puente de Alcántara actual es un segundo proyecto y que hubo un intento de construir un puente en época anterior», añadió.

Actualmente, el Puente de Alcántara aspira a formar parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Los resultados de la investigación podrían ser parte importante de esta propuesta.