Algunos de los trabajadores del Aepsa -antiguo PER- que han realizado distintos trabajos para el Ayuntamiento de Casar de Palomero expresaron ayer su malestar con el alcalde, José Antonio Arrojo, por el retraso que, según ellos, lleva el consistorio a la hora de pagarles el trabajo que han desempeñado recientemente. Los afectados, alrededor de quince personas, aseguran que están pendientes de percibir unos 600 euros cada uno y hay algunos que incluso llevan tres meses sin cobrar. Por su parte, el alcalde afirmó ayer que el ayuntamiento "ha abonado algunas nóminas hace poco tiempo" aunque confesó que desconocía exactamente si eran las atrasadas o las actuales.