La residencia geriátrica que se está construyendo en Navalmoral con fondos del Plan E del Ejecutivo central, en concreto con casi dos millones de euros, avanza cada día y las obras siguen un buen ritmo, pero aún así ha sido necesario pedir una prórroga para acabar su finalización. Este trámite ya se ha llevado a cabo y el próximo plazo para acabar la ejecución es el 30 de junio. "Las obras van bien, aunque no al ritmo que hubiese sido el compromiso del 31 de diciembre", sentencia José D. Pascual, primer teniente de alcalde de Navalmoral.

La empresa placentina Mego es la encargada de la construcción de la residencia, que está situada en las traseras del antiguo colegio El Pozón, en la Unidad de Actuación número 14 que es propiedad municipal. Contará con 2.500 metros cuadrados, tendrá tres alturas y forma de L.

Por otro lado, el alcalde de Navalmoral, Rafael Mateos, ha comenzado ya a trabajar en la moción que hizo el PSOE en el pleno de octubre y que fue apoyada por el PP, partido que gobierna el municipio. La moción consistía en solicitar a las cajas de ahorro que tienen sucursal en Navalmoral fondos, a través de sus obras sociales, para sufragar el equipamiento de la residencia. Según ha confirmado Pascual, el primer edil ya ha enviado cartas a todas las entidades susceptibles de colaborar e incluso se ha reunido con alguna. "Sí que ha habido algún contacto previo, pero nada concreto", indicó el teniente de alcalde.

La estimación del equipo de gobierno moralo es que los fondos necesarios para equipar la residencia, que tendrá más de un centenar de camas, es de uno 450.000 euros. Aunque según matizó Pascual "la estimación es muy grosso modo y la hemos hecho hablando con gente de sector", por lo que la cifra necesaria podría ser completamente distinta según factores como el tipo de equipos.