Los vecinos de Ruanes continúan consternados debido al presunto robo, el pasado Viernes Santo, de la imagen de la Virgen Dolorosa que se encontraba en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Según explicó el alcalde del municipio, Salvador Isidro, el templo permaneció abierto todo el día para que pudiera ser visitado.

La última vez que se vio la imagen fue sobre las 11.30 horas y nadie se dio cuenta de la pérdida hasta las 19.30 horas, "cuando terminaron los santos oficios y se iba vestir La Dolorosa para la procesión", relató el párroco de la población, Francisco Díaz.

A pesar del robo, los actos procesionales no se suspendieron. "Bajamos a la Virgen de Valdepenoso de la ermita a la iglesia" para celebrar la procesión del Viernes Santo y la de El Encuentro el sábado a media noche, "a pesar de la lluvia", comentó.

La pérdida de la imagen no sólamente conlleva el robo de un patrimonio de gran valor para el pueblo --una talla del siglo XIII--, sino también un significado sentimental de la imagen, con un metro de altura aproximadamente. "No se explica como puede haber personas que se dediquen a esto", lamentó el sacerdote del municipio.