Al son de disparos de fogueo, a lomos de un caballo y con un buen vaso de vino de pitarra de la comarca viven los vecinos de Cilleros y Valverde del Fresno los festejos patronales en honor a San Blas.

Cilleros acogió ayer la tradicional cata de vinos en los soportales del ayuntamiento con la participación de casi una treintena de bodegas y Valverde abrió las fiestas con la llamativa ruta nocturna a caballo iluminada tan sólo con las luces de las antorchas que portan los cientos de jinetes que participan en la actividad, que organiza el colectivo A Revolera. "Es algo maravilloso y cada día participan más caballistas, algunos llegados desde Portugal", explicó Francisco Antúnez, vecino de Valverde.

Mientras, en Cilleros los famosos caldos de Sierra de Gata son los protagonistas. Cinco expertos catadores se encargan de valorar las propiedades visuales, olfativas y gustativas de los casi treinta vinos que se presentaron al certamen. "El jurado lo ha tenido muy complicado, la calidad es muy alta también este año", opinó el alcalde, Saturnino López. Finalmente, el caldo de Daniel Vaz resultó el elegido, junto al de Angel Ramajo y al vino de Enrique Santero. "Cada uno tiene sus propios criterios, pero solemos coincidir al hora de elegir el ganador", dijo Silverio Moriente, catador y tío del futbolista del Valencia, Fernando Morientes.

En Valverde del Fresno las mujeres ataviadas con el traje típico recorren las calles del pueblo y animan las fiestas en las que no falta la degustación de dulces típicos, aguardientes y bailes populares, además de las tradicionales carreras a caballo. En Cilleros desde hace días suenan ya las coplas de San Blas y este año participan en la fiesta centenares de emigrantes cilleranos que, procedentes de Madrid, han llegado en varios autobuses para no perderse ni un detalle de la cita. Antonio Ramajo es uno de ellos y recuerda que cada año, cuando no puede desplazarse al pueblo, también celebran San Blas en el barrio de Aluche. Mañana los cazadores de Cilleros repartirán 500 kilos de carne guisada de jabalí y venado y en la cercana localidad de Valverde suena la charanga y huele a chacina, dulces fritos y a licor porque cuando llega San Blas es tiempo de comer, bailar y disfrutar.