El matadero comarcal de Coria, que viene prestando servicio desde el año 1995, ha sido cerrado por la Dirección General de Salud de la Consejería de Sanidad y Consumo de la Junta por "no tener las instalaciones adecuadas a la nueva normativa que exige la Unión Europea", según expuso ayer el grupo municipal del PSOE, en un comunicado.

El portavoz del partido socialista, Juan Valle, aseguró que hace un año la consejería informó al Ayuntamiento de Coria, propietario del matadero, de la existencia de ciertas carencias que debían subsanarse, pero el ayuntamiento, "no ha hecho ninguna actuación conducente a solventar dichas deficiencias", añadió.

El portavoz socialista en el ayuntamiento aseguró que esta situación es el resultado de "la falta de gestión y la inoperancia de un gobierno municipal que no está a la altura de las necesidades de Coria".

OPINIONES ENFRENTADAS En cuanto a la ejecución de las reformas que debían de haberse realizado para adaptar las instalaciones del matadero a la nueva normativa, las opiniones son discrepantes. El alcalde de Coria, Joaquín Hurtado, aseguró ayer a este diario que la culpa de que no se haya realizado ninguna reforma es, "exclusiva del particular". Hurtado reconoció que el ayuntamiento es propietario del inmueble, pero que la gestión del mismo está a cargo de la empresa Productos Cárnicos Juli.

Hurtado anunció que ayer mismo solicitó una entrevista con el director general de comercio para dar una solución cuanto antes y reiniciar la actividad del matadero.

Mientras, el gerente de dicha empresa, José Luis Bertol, aseguró que las reformas tenía que haberlas ejecutado el ayuntamiento como propietario de las instalaciones.

Bertol afirmó que el cierre del matadero hará perder 17 puestos de trabajo fijos y entre 30 y 40 indirectos. El matadero de Coria ha sido hasta ahora, junto al matadero de Olivenza, los únicos de Extremadura donde se sacrifican toros de lidia.

Se da la circunstancia que con la paralización de la actividad del matadero comarcal es el segundo cierre que la Consejería de Sanidad decreta en la localidad en menos de siete días.

El primer cierre fue el pasado lunes, día en que se comunicó al ayuntamiento el cese de la actividad del velatorio ilegal Nuestra Señora de Argeme hasta que el servicio obtuviera los permisos correspondientes para su puesta en funcionamiento.