El Palacio de Justicia de Valencia de Alcántara ha vuelto a reabrir sus puertas, concretamente el 23 de agosto, tras finalizar los trabajos correspondientes a la amplia reforma que se ha llevado a cabo en el interior de este edificio histórico, cuya construcción data del año 1909. Las obras se han desarrollado en algo más de un año y han alcanzado un coste de un millón de euros, presupuesto que ha sido financiados en su totalidad por el Gobierno Central.

El alcalde de la localidad, Luis Cándido Moreno, explicó que se ha mejorado la accesibilidad a las distintas plantas y salas del inmueble. Además, se han eliminado numerosas deficiencias de un edificio que estaba obsoleto. "Se ha hecho todo nuevo en el interior, solamente se ha conservado la fachada y el mobiliario, que se ha dejado el mismo que había", detalló Moreno.

Respecto a las obras del interior, estas han consistido en la construcción de un ascensor y la renovación del suelo. Además, también se ha renovado el tejado, lo que ha permitido eliminar las humedades y goteras.

CESION TEMPORAL Las obras ejecutadas en el Palacio de Justicia valentino se enmarcan dentro del Programa de Accesibilidad de los Edificios Judiciales, pero en este caso caso concreto, el notable deterioro del edificio ha obligado a realizar actuaciones de consolidación estructurales adicionales.

Durante la ejecución de las obras, el ayuntamiento cedió el Castillo de la Fortaleza para acoger la actividad del juzgado, de manera provisional hasta la finalización de las obras del Palacio de Justicia. Esta cesión la compensó el Gobierno Central destinando 53.000 euros a la realización de obras de mejora y adaptación en el citado Castillo de la Fortaleza, "unas obras que ya quedan para un futuro en beneficio de los ciudadanos del municipio", señaló Moreno.