El alcalde Joaquín Hurtado no cumple la ley y exigimos que lo haga", dijeron ayer representantes de algunas de las diez familias que residen en La Isleta y que se ven afectadas por la existencia de un muro que hace unos meses levantó por su cuenta la comunidad de propietarios de dicha urbanización.

Los vecinos, que se manifestaron ayer en el consistorio, recuerdan que el alcalde no ordena derribar el muro a pesar de que el ayuntamiento, en la comisión de obras celebrada el 1 de septiembre del 2003, aprobó un informe que se resolvió a favor de su retirada "por ser una obra ilegal e ilegalizable", recoge el escrito.

Los afectados concentrados en el ayuntamiento exhibían una pancarta para pedir al alcalde que cumpla la ley. Después de la manifestación, los vecinos intentaron hablar con Hurtado, pero éste no les atendió. "Nos dice la secretaria que no nos recibe el alcalde porque hemos venido con coacción, con malos modos y con publicidad", comentó indignada Marisol Bravo, una de las vecinas, que añadió que se sienten "engañados", porque "Hurtado nos prometió que el muro se tiraría".

Personas que de una forma directa participaron en la citada comisión de obras aseguraron ayer a EL PERIODICO que en el caso de que el ayuntamiento no cumpla el informe, será responsable de cualquier accidente o suceso que ocurra a causa del muro. El alcalde declinó hacer declaraciones.