En 2006 hubo 132 millones de descargas ilegales de filmes de Internet y se prevé que este año puedan llegar a los 200 millones, lo que supone que la piratería puede "acabar con los cimientos de nuestra industria", según estiman los participantes en la "Primera Mesa del Cine: Todos Contra la Piratería".

El encuentro, celebrado hoy, reunió a sectores actualmente enfrentados debido a sus distintas posturas frente a la nueva Ley de Cine, por lo que el presidente de la Federación de Productores, Pedro Pérez, se congratuló de esta unión frente a un enemigo común "que está fuera y no en esta mesa", dijo.

La "Primera Mesa del Cine: Todos Contra la Piratería", clausurada por la Ministra de Cultura, Carmen Calvo, fue organizada por la Academia de Cine junto a productores, distribuidores, exhibidores, empresarios de videoclubs.

Además de la Federación de Protección de la Propiedad Intelectual (FAP), Entidad de Gestión de Derechos Audiovisuales (EGEDA) o representantes de empresas de Internet.

Ante los datos que apuntan a España como el país con el índice de piratería más alto de Europa, un 32 por ciento, frente a su inmediato seguidor, Italia, con un 25 %, hasta llegar a Holanda, con sólo un 11 %, todos los componentes de la Mesa coincidieron en señalar la necesidad de tomar medidas "urgentes" ante lo que consideran "el sida que corroe los cimientos de nuestra industria".

La presidenta de la Academia de Cine, Ángeles González Sinde, resaltó el carácter industrial del séptimo arte, para señalar: "Todos necesitamos de la venta de nuestras creaciones para poder hacer la siguiente obra, y la piratería empequeñece nuestra industria".

El presidente de los productores (FAPAE), Pedro Pérez, apuntó que "los cimientos de la industria audiovisual autóctona están en riesgo. Solo reaccionando desde dentro se pueden salvar y podremos seguir existiendo", dijo, para luego señalar que la cuota de mercado del cine español ronda el 16 % y, si bien la piratería afecta también a la industria americana, "en una economía de escala, el pez pequeño tiene más dificultades que el pez grande".

Por su parte, el presidente de la Unión Videográfica Española, Ignacio Puebla, destacó que el suyo es el sector más afectado, calculando en un 62 por ciento los daños. De hecho, en los últimos 18 meses, se han cerrado el 15% de los videoclubs, unos 750 establecimientos, lo que supuso la pérdida de 1.800 puestos de trabajo.

Medidas educativas como solución

Las soluciones, y en ello coincidieron todos los ponentes, pasan por medidas educativas, con la concienciación del uso responsable de Internet; legislativas, con la creación de leyes ágiles adaptadas a las nuevas tecnologías; judiciales y policiales, con una mayor aplicación judicial y más efectivos policiales, y tecnológicas, con iniciativas legales y la creación de un mercado limpio y libre de competencia ilegal.

El presidente de la Federación de Distribuidores (Fedicine), Luis Hernández de Carlos explicó los cambios que desde la década de los 80 había sufrido la distribución, "en parte a causa de la piratería", con un acortamiento sustancial de la vida media de una película, un significativo aumento de los costes de lanzamiento, y el aumento del número de copias.

El director general de los exhibidores (FECE), Rafael Albero, hizo hincapié en la necesidad de trabajar en leyes efectivas que penalicen este fenómeno: "Hay que exigir a todos los Ministerios implicados -dijo- que actúen con urgencia y determinación".

Por su parte, Enrique Cerezo, en calidad de presidente de Filmotech, junto a Eduard Doménech, consejero delegado de Technofoundries (MediaXpres), y Luis Velo, director general de Proyectos Avanzados de Telefónica de España (Pixbox), expresaron su opinión, como representantes de empresas de Internet, de que, frente a las descargas ilegales, hay que ofrecer alternativas legales de calidad.

Entienden que hay que ofrecer un producto rápido, con calidad y un extenso catálogo de contenidos, dado que se calculan en seis millones los españoles que descargan una media de 50 filmes ilegales al año.

La ministra de Cultura, Carmen Calvo recalcó cómo una de las primeras medidas del Gobierno fue la puesta en marcha del Plan Integral contra la Piratería y señaló la importancia de la concienciación ciudadana y de las medidas policiales y jurídicas, entre las que cabe la especialización de agentes en piratería digital. Lo importante, dijo, es "redoblar esfuerzos de cooperación para enviar un mensaje único".