Cerca del 40 por ciento de las mujeres discapacitadas sufre o ha sufrido algún tipo de violencia física o sexual, pero en la mayoría de los casos no denuncia esta situación, bien por la dependencia que les une a su agresor o porque no es creída.

Así se ha puesto de manifiesto en el primer Congreso Internacional sobre Mujer y Discapacidad, que se celebra hasta hoy en Valencia y en cuyas sesiones también se destacó que las personas con alguna discapacidad sufren de dos a cinco veces más abusos que las personas no discapacitadas.

Los expertos coincidieron en señalar que no existen datos concretos sobre el porcentaje de mujeres discapacitadas que son víctimas de la violencia, ya que no se han elaborado estadísticas oficiales sobre esta materia y sólo hay estimaciones y estudios puntuales.

La directora del Centro de Investigación de Mujeres con Discapacidad de Houston (EEUU), Rosemary Hughes, aseguró que la propia discapacidad de la mujer favorece las agresiones físicas o sexuales, "ya que se trata de mujeres vulnerables a la violencia, que dependen de otras personas".