La fruta previene la hipertensión arterial, la obesidad e, incluso, algunos tipos de cáncer. Sin embargo, su consumo se está estancando en España. Cuatro de cada 10 ciudadanos no consume la ración mínima que recomienda la Organización Mundial de la Salud (dos piezas al día). Sus excusas son tan peregrinas como, por ejemplo, que resulta "engorroso" pelarla. Así lo constata una encuesta realizada por la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC) y Hero Nutrición en la que se afirma que los jóvenes son los más perezosos a la hora de hincar el diente a las manzanas.

La Organización Mundial de la Salud aconseja incluir en la dieta diaria 400 gramos diarios de frutas y verduras. Esa cantidad se traduce en dos raciones de fruta y tres de verdura. Pero la recomendación está cayendo en saco roto, según los datos de la encuesta (realizada el pasado mes de julio con 2.068 entrevistas). La población española "ha mejorado sus hábitos alimenticios", pero el 43% no consume la ración de fruta mínima aconsejada. A pesar de ello, siete de cada 10 encuestados considera que toma suficientes piezas al día.

Las excusas para dejar a un lado, por ejemplo, las peras, las manzanas y la piña resultan peregrinas. "Es engorrosa de pelar", "se estropea muy rápido" y "falta de tiempo" son algunos de los argumentos más utilizados para justificar la ausencia de fruta en la dieta.

Los que sí las incluyen, lo hacen por los beneficios generales para la salud (54,1%) y las vitaminas que contienen (38,9%). Solo un 9,2% lo hace por su buen sabor. Las piezas favoritas son las manzanas, las naranjas, los plátanos, las peras, los melocotones y los kiwis. Su consumo se concentra mayoritariamente en la comida, la cena y la merienda, aunque el 11% las toma como tentempié.

El estudio destaca que las personas adultas son las más disciplinadas a la hora de sentarse a la mesa. El 73,5% de los que tienen entre 55 y 65 años ingiere las dos raciones recomendadas por la OMS. Sin embargo, más de la mitad de los menores de 15 años no lo hacen a pesar de que ocho de cada 10 padres lo consideran "muy importante".

El 39% de los padres aseguran que cuando les dicen a sus hijos que tomen fruta, estos se niegan poniendo excusas como "es engorroso de pelar", "no tengo tiempo", "no me apete- ce", "no me gusta" y constata que la fruta es cosa del verano. De hecho, siete de cada 10 residentes en España solo toma fruta en esa época.

Respecto a otros hábitos de alimentación, el estudio afirma que el 12,3% de los españoles reconocen haber seguido algún tipo de dieta en el 2006. Uno de cada cuatro declara haber introducido cambios en su dieta en el sentido de aumentar los productos verdes y disminuir las grasas.