Según un balance provisional, 63 personas fallecieron ayer en la República Democrática del Congo (RDC) cuando un Boeing 727 de las líneas aéreas Hewa Bora con destino a Kinshasa, se desplomó sobre un barrio de la ciudad de Goma.

Seis personas, dos pilotos y cuatro pasajeros, dos de ellos niños, sobrevivieron a la catástrofe. El país africano tiene uno de los peores balances en cuanto a aviación civil se refiere. En el 2007 hubo ocho accidentes aéreos. Es el tercer accidente grave que se registra en menos de un año, en todos los casos con decenas de víctimas y teniendo como protagonistas aviones de transporte de carga que son utilizados para llevar pasajeros.