Un informe realizado por el Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia constata que durante 2007 se produjeron en España 72 asesinatos de mujeres a manos de sus parejas o exparejas, tres casos más que el año anterior, lo que supone un incremento del 4,35% y la mayor cifra de los últimos cinco años.

El informe, hecho público ayer por la entidad que dirige José Sanmartín, se basa en datos recopilados entre informaciones periodísticas y fuentes judiciales y policiales. Por autonomías, las comunidades de Madrid y Cataluña son las que más casos han registrado, 11 víctimas, seguidas por la Comunitat Valenciana (10) y Andalucía (8), mientras que las provincias con mayor incidencia han sido Madrid (11), Alicante (6) y Barcelona (5).

En términos relativos, casi cuatro mujeres por cada millón de ellas mayores de 14 años han muerto a manos de sus parejas o exparejas en el último año. En proporción al número de mujeres residentes en las distintas comunidades o ciudades autónomas, donde más casos de violencia doméstica se registran es en Melilla (37,54%), Cantabria (7,7%) y Castilla-La Mancha (7,17%).

El perfil de edad de la víctima responde, en 21 casos (el 30,88% del total), a mujeres de entre 25 y 34 años, seguidos por los 15 casos del tramo 35-44 años, los 11 de más de 64, los 10 con edades entre los 45 y 54 años y los 7 casos de mujeres asesinadas por sus compañeros sentimentales que tenían entre 55 y 64 años.

70% ESPAÑOLAS El 70,59% de las mujeres asesinadas era de nacionalidad española, el 20,83% provenían de Sudamérica, el 10,11% de países de la Unión Europea y un 2,78% provenía de países africanos.

Asimismo, el 83,33% tenía un trabajo no cualificado, mientras que al menos el 25% de las víctimas tenía empleo. Además, el 34,72% de las mujeres asesinadas había sufrido previamente malos tratos, el 31,94% había denunciado a su agresor y, al menos, 2 de cada 10 de sus agresores tenía, en el momento del crimen, una orden de alejamiento. En cuanto al momento en el que el agresor mató a su pareja, éste lo hizo en presencia de sus hijos en el 9,72% de los casos.

El Centro Reina Sofía destaca, con estas estadísticas, que la mayoría de los asesinos de estas mujeres han sido detenidos y uno de cada diez se ha suicidado.