Buscar una adecuada definición de las cosas siempre trae sus consecuencias. Que se lo pregunten a las estrellas del porno o al alcalde de Alcollarín, Adrián Rodríguez . En el caso del edil extremeño, su empeño en buscar una perfecta definición del padrón municipal ha provocado la protesta de 27 vecinos, simpatizantes del PP, que aseguran que han sido dados de baja en el censo para que el alcalde, socialista, obtenga una mayoría absoluta en las elecciones. Los vecinos han buscado amparo en el Defensor del Pueblo, mientras que el edil sostiene que los afectados no tienen su residencia habitual en el municipio. Así, entre unos y otros están haciéndose la puñeta. Y hablando de darse por ciertos sitios, a los que tampoco les ha sentado nada bien la alta definición ha sido a los actores de las películas pornográficas. Parece que el boom de los televisores de alta definición ha puesto de relieve arrugas, celulitis, ángulos poco atractivos y fallos en los implantes de silicona. Nada es lo que parece y por ello los actores han recurrido a tratamientos y operaciones de urgencia para arreglar los originales o las prótesis.
Definir con precisión demuestra por tanto dos cosas: que los del PP tienen más casas que los del PSOE, al menos en Alcollarín, y que el porno, visto de cerca, destroza mitos. La solución a los dos problemas podría ser que Adrián Rodríguez no se presentara a las próximas elecciones y que la industria del porno le contratase para hacer un buen padrón de actores, aunque cabría el riesgo de que los populares se quedaran sin trabajo en el sector y que la mayoría del reparto en las películas fuera socialista.
