La Junta de Castilla y León tuvo que movilizar ayer a seis helicópteros y dos aviones anfibios, además de un equipo de extinción compuesto por unas cien personas, para combatir las llamas de un incendio declarado en el municipio abulense de El Hornillo, enclavado en el valle del Tiétar.

El Ejecutivo autonómico declaró el nivel 1 de riesgo porque calculó que las llamas no podrían ser sofocadas antes de doce horas y porque podrían afectar a una superficie superior a las 30 hectáreas de arbolado.

La orografía y la inaccesibilidad de la zona en la que se declaró el incendio, dado que apenas existen caminos por los que acceder, complican las labores de extinción, según explicó la Junta de Castilla y León en un comunicado.

A LAS DOS DE LA MADRUGADA / Las llamas comenzaron en torno a las dos de la madrugada y la causa probable es la reproducción de un incendio anterior por las elevadas temperaturas.

En el lugar del incendio se encontraban trabajando ayer numerosos medios terrestres y aéreos de la Junta de Castilla y León y del Ministerio de Agricultura, en concreto seis helicópteros -uno de ellos de coordinación- dos aviones anfibios, siete camiones autobombas, ocho cuadrillas, seis agentes medioambientales y un técnico.

Desde los servicios de emergencia y prevención subrayan que la ola de calor que está viviendo España estos días genera situaciones proclives a que sucesos como el del valle del Tiétar se repitan, por eso se hace un serio llamamiento a la precaución.