Amigo, colega, compañero de todo el mundo que tuvo la suerte de estar a tu lado y disfrutar de tu simpatía, amistad y compañerismo. Qué fastidio, Joselino, que ahora nos tengamos que conformar con la terrible ausencia de un motero entrañable y gran amigo. Espero y deseo de todo corazón que donde estés haya autopistas, carreteras de montaña y curvinas para disfrutar con el mundo de las motos, uno de tus amores preferidos. Recuerdo con cariño el día aquel de la puta cadena cuando la vi resbalando por la carretera delante de mí, y te dije, "Joselino, cabrón, me he podido matar", y respondistes con la humildad que te caracterizaba, "que coño quieres que haga, se partió". Nuestros piques para ver quién acelaraba más, como el día de Brozas. ¿Te acuerdas? Espero, y puesto que el logotipo de tu máquina son dos alas doradas, las utilices allí donde estés para poder surcar las autopistas del cielo, sin encontrar ningún obstáculo más en tu camino. Recibe ráfagas y uves desde una ZZ-R.

Antonio Plano .

Malpartida de Cáceres