El Consejo de Estado, uno de los órganos asesores del Gobierno, ha emitido un informe en el que avala tanto el contenido de la futura asignatura de Educación para la Ciudadanía como la propuesta del Ejecutivo para la enseñanza de la Religión, según aseguró ayer el Ministerio de Educación. La asignatura Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos --que ha despertado recelo en el episcopado-- se cursará en primaria y ESO e inculcará a los alumnos los valores sociales y cívicos, incluida la igualdad entre los dos sexos.

Respecto de la Religión, pretende que los padres que no quieran que sus hijos cursen esa asignatura --en su versión confesional o laica-- deberán recibir "la debida atención educativa a fin de que la elección no suponga discriminación alguna".