Un Consejo de Ministros extraordinario aprobó ayer el decreto de ley sobre las ayudas para paliar los daños causados por los incendios de Gran Canaria y Tenerife. Los subsidios prevén, además de indemnizaciones por la pérdida de viviendas e infraestructuras, la exención del impuesto de bienes inmuebles; reducciones del IVA, el IRPF y el impuesto sobre actividades económicas; créditos preferenciales a bajo interés y aportaciones para comprar vehículos.

El Ministerio del Interior espera que en tres meses se hayan pagado los daños, que en el caso de la masa forestal son menores de lo esperado. Los fuegos han afectado a 11.000 hectáreas, en lugar de las 30.000 que se creyó en un principio.

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, señaló en rueda de prensa que "ha habido un momento muy difícil en el archipiélago canario, pero se ha respondido con muchos más medios que los que ha tenido nunca Canarias". Por otra parte, el presidente del Gobierno Canario, Paulino Rivero realizó ayer una visita a las zonas dañadas por el incendio de Gran Canaria, en la que estuvo acompañado por los alcaldes de los municipios afectados.