Cada día que pasa tras el apagón se hace más evidente que la actual red de distribución eléctrica de Barcelona es insuficiente para asumir la más mínima contingencia y como consecuencia del apagón del lunes, la ciudad va a tener que abastecerse a través de una red provisional, al menos durante tres o cuatro meses, que es el tiempo que se prevé necesario para restablecer el uso de la subestación de Maragall, por lo menos el dispositivo que se encarga de transformar la tensión de 220 kilovoltios de Red Eléctrica Española a los 110 que transcurren por la red de Endesa.

El GIS (Gas Isolated Switching) de Maragall ha quedado calcinado por la sobretensión que se generó en el accidente del lunes. Y aunque la red de baja tensión podría funcionar, es imposible que lo haga desde esa subestación hasta que se restablezca el equipo de REE.

Fuentes de Endesa, de la que depende la instalación, señalaron ayer que no es probable que eso ocurra antes de tres o cuatro meses, mientras que desde REE no supieron precisar cuánto tiempo será necesario para reparar sus instalaciones de Maragall y volverlas a conectar. La fabricación de un GIS puede comportar meses, por lo que en caso de que REE no disponga de uno de ellos en situación de ser trasladado a Barcelona, el proceso se prolongaría.

Mientras tanto, los últimos hogares que permanecían a oscuras, de los 150.000 que reciben suministro habitualmente desde esta subestación, lograron recuperar en su mayor parte la conexión a partir de los grupos electrógenos desplegados. Transcurridas 60 horas, Fecsa-Endesa ha conectado los 134 grupos entre los distritos afectados.