La sección Perlas de Otros Festivales presentó ayer la película de Bernardo Bertolucci Soñadores (The dreamers ), que se proyectó en la reciente Mostra de Venecia fuera de competición. El realizador italiano repitió ayer tarde algunos de los argumentos expuestos en el Lido veneciano y matizó otras opiniones. En San Sebastián fue drástico al afirmar: "Muchos de los que vivieron el mayo del 68 creen que fracasó. Eso es un error histórico y, además, una gran injusticia".

El cineasta recordó que cuando estaba preparando en París el cásting para este película se dio cuenta, hablando con chicos y chicas, de que su conocimiento del mayo del 68 era muy pobre. "Y éstos son los hijos de la generación protagonista de las barricadas en las calles de París. Hay un cierto revisionismo para rechazar el impacto y los efectos de aquél movimiento", añadió.

A su entender, antes de mayo del 68 la vida era muy distinta. Sobre todo las relaciones entre las personas, entre hombres y mujeres, ya que de ahí vino la gran eclosión del feminismo. El cineasta reveló que al presentar la película en Venecia se dio cuenta de que "los líderes de aquel movimiento se encuentran ahora en el otro bando, algunos son directores de diarios de centro-derecha y han negado una y otra vez la vigencia de aquella rebelión". Avanzó que su próxima película la realizará en Italia, pero sobre una Italia no existente, ya que está situada en Nápoles en 1590.

UN CUADRO

Una de las mayores alegrías de la sección competitiva del festival la dio ayer La joven de la perla , una coproducción de Luxemburgo y Gran Bretaña que dirige con singular acierto Peter Webber.

La película se basa en la novela de Tracy Chevalier y gira en torno a la creación de un cuadro del maestro holandés Johannes Vermeer que tiene como modelo a una joven y bella sirvienta. Cada plano parece un cuadro de la época surgido del pincel de este pintor que fue uno de los primeros en investigar la esencia de la luz. Pero, además se retrata la realidad en la Holanda del siglo XVII: la aguda diferencia entre estamentos sociales, el poder del dinero, los abusos de los poderosos, la pasión y la dignidad.

La otra cinta en concurso fue Crepúsculo rojo , del argentino Edgardo Cozarinsky y con Marisa Paredes como protagonista femenina. Es un relato con ribetes fantásticos sobre los esfuerzos por exorcizar el pasado.