Bomberos del Ayuntamiento de Madrid retiraron ayer de la subestación de Unión Fenosa que ardió el pasado jueves un transformador de 30 toneladas totalmente calcinado. Los efectivos del cuerpo continuaron durante todo el día las labores de extinción ante la sospecha de que en otro transformador todavía había fuego.

Los bomberos tuvieron que utilizar una grúa de espectaculares dimensiones para sacar del edificio uno de los enormes cubos metálicos que transforman la energía. Unión Fenosa sostiene que la causa del siniestro fue uno de estos aparatos que empezó a arder cuando estaba en fase de calentamiento antes de entrar en servicio. En el lugar del siniestro, permanecían ayer 10 bomberos que seguía trabajando para refrescar otro transformador ante la posibilidad de que continuara ardiendo.

Unión Fenosa abrió ayer sus oficinas para atender las quejas y reclamaciones de los afectados, que también podrán presentarse hoy. A mediodía de ayer, la compañía había recibido un total de 214 quejas, cantidad que "no son demasiadas" a juicio de Unión Fenosa. La mayoría de ellas se refieren a alimentos dañados por falta de electricidad y a aparatos estropeados.