El presidente del Congreso, José Bono, confió ayer en que la reforma de la ley del aborto que prepara el Gobierno logre "el máximo consenso posible" durante su tramitación parlamentaria. El dirigente socialista, conocido por sus profundas convicciones religiosas, prefirió no opinar sobre la masiva marcha del sábado en Madrid para no "interferir" en un futuro acuerdo entre las fuerzas políticas.

"El aborto no es un asunto ideológico sino que afecta más al modo de concebir la vida que a la ideología", recalcó antes de ir a la misa de beatificación del cardenal Ciriaco María Sancha en la catedral de Toledo. "Basta con ver las encuestas para percatarse de que las opiniones no están en relación directa al voto de los ciudadanos, sino que se puede estar en una posición de derechas o de izquierda", recalcó.

Bono instó a los partidos a quitar la "carga ideológica" de la futura ley de interrupción del embarazo y a trabajar para lograr "un gran acuerdo". A pesar de que no hizo explícita su posición personal, sí admitió que coincide "en gran medida" con la del grupo de Cristianos Socialistas.

La opinión de este colectivo, que ayer expuso en un artículo en El País sus argumentos, aprueba el núcleo duro de la propuesta del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Pero es crítico con el apartado que autoriza a las menores de 18 años a abortar sin que lo sepan sus padres. Precisamente este es uno de los aspectos que el grupo parlamentario podría replantearse.

El Consejo de Estado recomendó al Ejecutivo, en un informe no vinculante, que los progenitores de las chicas de 16 y 17 años sí fuesen informados si sus hijas se sometían a una intervención de este tipo. El portavoz del PSOE en la Cámara Baja, José Antonio Alonso, dijo entonces que trataría de negociar con grupos como ERC o ICV-EUiA estas modificaciones, algo a lo que estos se mostraron abiertos.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, anunció ayer que la próxima semana presentará una enmienda para devolver la reforma de la ley del aborto al Gobierno. Rajoy acusó a Rodríguez Zapatero de actuar con "soberbia" y le invitó a "escuchar a la gente".

NUEVAS CIFRAS La empresa Lynce, contratada por la agencia Efe, ha cifrado en 55.316 los manifestantes del sábado en Madrid, con un margen de error del 15%, con lo que como mucho se habrían reunido 63.300 personas. Estos datos distan mucho de los ofrecidos por los antiabortistas (dos millones de personas) y también del cómputo de la policía (250.000).