El tenista alemán Boris Becker aprovecha el verano para descansar en el norte de Mallorca, donde disfruta de la compañía de su hijo Noah y de unos amigos alemanes. El deportista fue noticia a finales del mes pasado, cuando anunció que rompía un noviazgo de dos años con la bailarina Caroline Rocher.

Los rumores apuntan a que la causa de la ruptura fue una belleza rusa, de nombre Elena, a la que el tenista conoció en la misma isla balear.