La petrolera británica BP aseguró ayer que creen que seis horas después de que empezara su nuevo intento de sellar el vertido de crudo en aguas del golfo de México, en este momento solo saldría lodo de la fuga, y no petróleo, lo que consideran "un éxito" en su tarea de frenar el escape.

"Lo que han estado viendo subir a la superficie es muy probable que sea lodo", afirmó el jefe de operaciones de BP, Doug Suttles, en una rueda de prensa celebrada por teleconferencia desde su cuartel general en el estado de Louisiana.

"No lo podemos confirmar plenamente porque no hemos podido tomar muestras, pero hasta donde sabemos estamos teniendo éxito" en el sellado de la fuga de petróleo, que comenzó hace más de un mes tras el colapso de la plataforma petrolífera Deepwater Horizon, en el que murieron 11 trabajadores.

DOS FRACASOS

Se trata del tercer intento de BP de sellar una fuga de petróleo que amenaza con provocar la mayor catástrofe ecológica de la historia de EEUU. En esta ocasión tratarán de taponar mediante una acumulación de lodo pesado y cemento. Según la compañía, no será hasta hoy a última hora (en horario español) cuando se sepa si han tenido éxito.

La nueva estrategia de sellado de la fuga, denominada top kill, es un procedimiento rutinario para sellar pozos situados en la superficie, pero nunca se ha intentado a una profundidad de 1.500 metros bajo el agua, donde está la fuga actual.

BP, que ya intentó sin éxito en el pasado en dos ocasiones detener el vertido mediante la colocación de dos contenedores campaniformes sobre la fuga de crudo, opina que la nueva estrategia tiene unas posibilidades de éxito de entre el 60% y el 70%. Otros expertos rebajan las posibilidades de éxito al 50%.