La Tomatina de Buñol se saldó hoy sin heridos de gravedad y únicamente tuvieron que ser atendidos alrededor de una decena de participantes, la mayor parte de ellos con afecciones leves en los ojos como consecuencia del lanzamiento de tomates.

Según confirmó a Efe la concejala de Fiestas, Feria, Cultura y Deportes, este año no hubo que lamentar heridos de consideración en este tradicional festejo, a pesar de la gran cantidad de participantes, que este año alcanzó el récord con más de 40.000.

En el puesto de atención sanitaria del Ayuntamiento, uno de los cinco que fueron habilitados en todo el recorrido de la Tomatina, únicamente fueron atendidas siete personas en toda la mañana, una como consecuencia de un ataque de ansiedad que no revistió complicaciones, otra por un golpe en la rodilla y cinco por escozores en los ojos.

"Sólo a una de las personas que llegaron con molestias en los ojos se le aconsejó que fuese al hospital, dado que consideramos necesaria una revisión más a fondo ya que había sufrido un fuerte golpe", señaló a Efe la doctora Fernández, responsable de este puesto sanitario.

"El resto de curas han consistido únicamente en limpiar los ojos con suero fisiológico y colirio antibiótico como precaución, no ha habido nada grave", concluyó.