La policía ha desarticulado una red internacional de ciudadanos nigerianos que se dedicaba a la introducción ilegal en Europa de compatriotas a las que obligaban a prostituirse amenazándolas con ritos de vudú.

La operación se ha desarrollado de forma conjunta con la policía alemana y se ha saldado con la detención de 12 personas en Madrid, Zaragoza, Alicante y Málaga, entre las que se encuentra el presunto cabecilla, N. R. E., alias el Pastor, arrestado en la localidad madrileña de Alcalá de Henares. Los agentes estiman que la red obtuvo unos beneficios de tres millones de euros desde que comenzaron a delinquir, hace cinco años, y que, además de al tráfico ilegal de personas, se dedicaban a concertar matrimonios entre extranjeros y españoles.

Según las investigaciones, el cabecilla contaba con la colaboración de varias personas, generalmente mujeres, que agredían y atemorizaban a sus víctimas con rituales de vudú, así como con otras amenazas y coacciones y a las que agredían físicamente.

Los responsables del grupo mantenían en su poder las bolsas con efectos personales y restos orgánicos recogidos tras los rituales del vudú.