La policía ha desarticulado en Tarragona y Alicante una organización de ciudadanos rumanos dedicada a la inmigración ilegal de mujeres de su misma nacionalidad para su explotación sexual en la costa mediterránea. En la operación fueron detenidas 39 personas, entre ellas cinco españoles.

La red operaba en las comunidades catalana y valenciana y disponía de infraestructura en Rumanía. Fuentes policiales informaron que los detenidos falsificaban pasaportes y otros documentos de mujeres mayores de edad, sustituyendo las fotografías y los datos personales por las de menores de 16 y 17 años, que eran trasladadas a diferentes puntos de la costa mediterránea para obligarlas a prostituirse.