El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, anunció ayer que su departamento pondrá en marcha la próxima semana un plan que incluirá una red de primera acogida a inmigrantes, para recibirlos dignamente cuando son trasladados a la Península, al no poder repatriarlos a sus países de origen tras haber pasado 40 días en centros de internamiento.

Caldera precisó que la iniciativa trata de evitar la repetición de situaciones como la creada en Murcia, ante el envío de 60 inmigrantes desde Canarias, que las autoridades locales y autonómicas se niegan a acoger.

El nuevo plan, que se pondrá en marcha la próxima semana con financiación del Ministerio de Trabajo, incluye --según Caldera-- la cooperación no sólo con las ONG sino también con ayuntamientos y comunidades.

Estas dos instituciones serán informadas previamente de los traslados que les vayan a afectar, ya que Murcia, Valencia y Alicante han denunciado que no son avisadas. El plan también pretende intensificar las negociaciones con los países de origen con los que todavía no existen acuerdos de repatriación.