El director español Calixto Bieito aguarda "nervioso" el estreno en el Festival de Edimburgo de su esperado Hamlet , un montaje con el que ha "desestructurado" la obra de Shakespeare igual que el restaurante El Bulli hace con sus famosas tortillas.

"Es como Ferrán Adriá, que deconstruye los platos; pues yo he deconstruido la obra para volverla a construir", dijo en una entrevista telefónica desde la capital escocesa, donde esta noche se estrena su Hamlet entre una gran expectación y el cartel de "no hay billetes".

La organización del Festival de Edimburgo considera la obra del director catalán una de las grandes atracciones de esta edición, que se acerca a lograr un récord de recaudación, a lo que van a contribuir los diez días en escena de Hamlet , representada en lengua inglesa.

"Por supuesto que va a ayudar; hay ya cinco representaciones agotadas y otras muchas que andan cerca", dijo una portavoz del festival de la capital escocesa.

Acostumbrado al revuelo que causan sus montajes de obras clásicas mediante recursos modernos, en esta ocasión Bieito presenta a un príncipe que se debate entre el "ser o no ser" en un mundo de "corrupción política".

"Es como ver por un agujero a una familia monárquica actual y observar sus vicios, sus defectos, sus virtudes, sus problemas (...) Hamlet es una obra sobre la corrupción humana y política, y también sobre la corrupción física", explicó.