El camionero alemán detenido la semana pasada por los Mossos d´ Esquadra y la policía de Baviera por el asesinato de varias prostitutas viajaba con las fotos de sus víctimas colgadas en la cabina de su vehículo. Además, guardaba cabellos de casi todas en pequeñas bolsas de plástico. "Los psicólogos tendrán mucho trabajo. Estamos ante una persona enferma, que se excitaba estrangulando a sus víctimas mientras hacían el acto sexual". Así describió ayer el inspector Jordi Bascompte, jefe del Area Regional de Investigación de los Mossos en Girona, a Volker Eckert, que ya ha confesado la muerte de seis mujeres.

res de los crímenes tuvieron lugar en Catalunya: el de la joven búlgara Miglena Petrova, encontrada en Hostalric el 3 de noviembre; el de la chica sin identificar hallada en Sant Sadurní d´ Osormort (Osona) en marzo de año pasado, y una tercera víctima encontrada en Ma§anet de la Selva en octubre del 2001, identificada como Isabel Beatriz Díaz Muñoz. La única española del camionero.

En Francia se le atribuyen dos asesinatos, el de una prostituta en Burdeos en 1999, y el de otra chica en Reims. El inspector Bascompte confirmó por la mañana que confesó durante el interrogatorio el asesinato de una prostituta en Alemania, aunque, posteriormente, el fiscal alemán aseguró que el juez no le atribuye este sexto crimen.

La policía desveló detalles de las investigaciones. Así, se ha sabido que las fotos que había hecho a los cadáveres de las chicas estaban estaban colgadas en las paredes del vehículo. Eso sí, en la zona trasera, donde tenía una litera y se sabe que no le preocupaba ser descubierto.