Tiene 35 años, edad a la que muchas de sus antiguas compañeras de pasarela llevan ya mucho tiempo fuera de órbita, pero la británica Naomi Campbell está imponiendo de nuevo su felina figura y su experiencia como auténtica reina de la Semana de la Moda de Nueva York, donde enlaza un desfile tras otro sin olvidarse de las fiestas.
Campbell parece haber firmado algún tipo de pacto con el tiempo. Una agitada vida sentimental, algún intento de suicidio y esos "problemas con las drogas y el alcohol" que acaba de reconocer en una entrevista en Estados Unidos, no le han impedido llegar en forma a una de las grandes citas mundiales de la moda. El miércoles abrió ella la semana como estrella de dos desfiles para dos firmas --porque ya nadie puede pagarle la exclusividad-- y por la noche se fue, como si nada, a una fiesta que terminó de madrugada.
LOS POBRES EN PALACIO La princesa Mette-Marit y el príncipe heredero de la corona noruega, Haakon, lanzaron ayer una invitación a "los pobres de Noruega" para asistir a un banquete en su residencia privada de Skaugum, a las afueras de la ciudad de Oslo. La idea de la invitación surgió a través de un teletón patrocinado por Mette-Marit. La cena con las personas socialmente más desfavorecidas tendrá lugar el próximo 14 de octubre en su residencia oficial.
NUEVA NOVIA DE ALEC BALDWIN El actor Alec Baldwin acudió el jueves, en Nueva York, al encuentro de tenis que enfrentaba a Andy Roddick y Joachim Johansson. El artista, que dista mucho de ser el galán que conquistó el corazón de Kim Basinger y con la que formó uno de los matrimonios más sólidos de Hollywood, apareció acompañado de su nueva novia, aunque no le gustó ser fotografiado.
