El cáncer continúa siendo la enfermedad más temida para un 64 por cien de los españoles, según una encuesta presentada hoy por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), que refleja también que el mismo porcentaje de la población ha vivido la enfermedad en familiares o amigos cercanos. Basado en una muestra de más de 2.000 entrevistas realizadas en todas las comunidades autónomas, el estudio señala que solo un 11 por cien de los preguntados considera que tiene un riesgo alto de padecer cáncer.

Estos datos contrastan con el hecho de que uno de cada tres hombres y una de cada cinco mujeres padecerá cáncer a lo largo de su vida, señaló hoy el presidente de la SEOM, Alfredo Carrato, en la presentación del estudio. Al explicar su temor al cáncer, el 36 por cien de los preguntados lo justifica porque lo relaciona con la muerte, el 27 por cien porque la considera una enfermedad incurable o difícil de curar y uno de cada cuatro porque produce dolor.

Del 11 por cien de la población que considera que tiene un riesgo alto de padecer la enfermedad, un 57 por cien afirma tener esta sensación por sus antecedentes familiares; un 33 por cien por ser fumador; un 15 por cien por la exposición a la contaminación, y un 9 por cien por su edad avanzada. En este sentido, Carrato subrayó que solo entre un 5 y un 10 por cien de los cánceres son hereditarios y advirtió de que existen otros factores de riesgo, además del genético. Algunos sí son tenidos en cuenta por la población, como el tabaquismo o la exposición al sol, que fueron señalados por un 76 por cien y un 29 por cien de los encuestados por la SEOM. Sin embargo, otros factores como la obesidad o el sedentarismo, no son percibidos como tales, explicó Carrato.

Conocimiento de factores de riesgo

El conocimiento de los factores de riesgo es mayor en las mujeres y en personas con mayor nivel educativo. Estas diferencias se repiten en la percepción de los síntomas. Un 80 por cien de las mujeres señalan como tales los bultos o nódulos frente a solo un 53 por cien de los hombres, además las mujeres vigilan más y acuden antes al médico. En su conjunto, los síntomas de cáncer más conocidos son un bulto o nódulo (67 por cien), seguido de una mancha o lunar (35 por cien), dolor persistente (30 por cien), pérdida de peso (24 por cien).

No obstante, otros síntomas como el sangrado o las hemorragias, que pueden presagiar un cáncer de colon, o la tos o la ronquera, que podría ser síntoma de un cáncer de pulmón, solo son citados por un 24 y un 19 por cien de los preguntados, respectivamente. Carrato concluyó que el estudio corrobora la necesidad de "desmitificar" el cáncer, ya que de hecho un 57 por cien de los pacientes sobreviven a la enfermedad al menos 5 años y pone en evidencia que se debe informar sobre los factores de riesgo y los síntomas de la enfermedad.

El estudio refleja una valoración positiva de la oncología en España, ya que el 67 por cien considera que está al mismo nivel o por encima de otros países desarrollados, aunque un 33 por cien considera que el cáncer se podría detectar antes si el sistema sanitario no estuviera tan masificado. Carrato reconoció que el sistema sanitario "puede retrasar un diagnóstico", pero apeló a la responsabilidad de la propia persona que debe acudir al médico en cuanto detecte cualquier síntoma.

El presidente de la SEON abundó en la prevención primaria mediante la adopción de hábitos saludables, un aspecto en el que la responsabilidad recae en la persona, mientras la articulación de prevención de programas de prevención precoz corresponde a las autoridades, señaló. Así recordó que el cáncer de cérvix ha dejado de ser un problema en países desarrollados porque se detectan las lesiones precoces en las consultas periódicas. El informe refleja que el 35 por cien considera que el papel principal de la prevención debe recaer en el individuo, el 25 por cien las autoridades sanitarias y el 21 por cien el médico.