Un equipo de pescadores neozelandeses ha apresado en aguas del océano Antártico un calamar gigante de 450 kilogramos y ojos del tamaño de un neumático, según informa la prensa local.

El animal, de la familia de los Architeuthis, estaba comiéndose a otro pescado cuando fue arrastrado hasta la superficie, según ha explicado el ministro de Pesca de Nueva Zelanda, Jim Anderton, citado por el servicio de noticias One News.

La tripulación del barco se apresuró entonces para subirle a bordo en las mejores condiciones posibles, por lo que apagaron la bobina y buscaron la mejor manera de introducirlo en la carga de la embarcación antes de congelarlo y llevarlo de vuelta para que fuera analizado por científicos.

El ministro ha confirmado que el animal, de 10 metros de largo, ya se encuentra en Nueva Zelanda y que es el adulto de mayor tamaño que ha podido apresarse totalmente intacto.

Los calamares gigantes, pertenecientes como su hermano más pequeño y la sepia a la familia de los cefalópodos, son una de las criaturas más misteriosas de las profundidades del mar, y pueden llegar a medir hasta 14 metros de largo desde la punta de la matriz hasta el final de los tentáculos.

Nadie sabe a ciencia cierta hasta qué tamaño llegan a crecer, o su longevidad, pese a los numerosos estudios practicados hasta la fecha en animales muertos.