El gobierno catalán reconoció ayer por primera vez que se replanteará construir la tubería del Ebro a Barcelona si persisten las lluvias y se asegura el abastecimiento, aunque esta situación, por el momento, no se da, por lo que se mantiene la situación de excepcionalidad. El presidente abogó por "no precipitarse" al derogar el decreto de sequía. EFE