China se convirtió ayer en el quinto país, tras Tailandia, Vietnam, Indonesia y Camboya, en confirmar oficialmente la muerte por gripe aviaria de una persona, concretamente una mujer de 24 años que falleció el día 10 en la provincia de Anhui. Las autoridades locales también informaron de otra persona infectada, en Hunan, donde hasta ahora sólo se habían reportado tres casos sospechosos. Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) aún no ha incluido a los nuevos afectados en sus estadísticas, cosa que podría ocurrir en las próximas horas, el número de muertos desde diciembre del 2003 ya asciende a 65, mientras que los afectados son 128.

El otro caso de contagio confirmado corresponde a un niño de la localidad de Xiangtan (Hunan) que tuvo síntomas de la enfermedad en octubre pero se recuperó y fue dado de alta. Aunque su hermana de 12 años falleció presuntamente por gripe aviaria el 17 de octubre, oficialmente sólo es considerada un caso sospechoso. Para la OMS, el caso de la niña, que fue incinerada poco después de morir, "no puede ser confirmado" por "insuficientes evidencias", según fuentes del Ministerio de Sanidad de China. Tanto el niño como su hermana ingirieron pollo y convivieron estrechamente con aves en su pueblo, una de las zonas afectadas.

Hasta ahora, los únicos presuntos enfermos eran los dos hermanos de Hunan y un maestro de 36 años de una localidad cercana, cuyo caso es analizado actualmente por los expertos de la OMS. En declaraciones a la agencia France Presse, el doctor Wang Cheng, director del Hospital de Chaoyang, descartó la infección: "Estamos seguros de que no tiene la gripe aviaria". Otro enfermo sospechoso, aún no confirmado, es el de una campesina de Liaoning (noreste).