La curación completa, generalizada y sin graves efectos secundarios de la infección por el virus de la hepatitis C, el contagio hepático más grave, ya es posible, según ha corroborado un estudio realizado por el Hospital Clínic, de Barcelona, en el que han sido tratados 380 enfermos de esta forma de hepatitis, que además sufrían una cirrosis avanzada. El nuevo tratamiento ha eliminado la hepatitis C (no la cirrosis) al 95% de los pacientes tratados. Las terapias aplicadas hasta ahora contra la hepatitis C logran la curación del 50% de los enfermos y, en algunos casos recientes, del 75%. El tratamiento curativo irrefutable y universal de esta grave forma de hepatitis no existía.

Los pacientes tratados en el ensayo del Clínic, explicó ayer el hepatólogo Xavier Forns, coordinador de la investigación, no podían tolerar la terapia con que habitualmente se trata la hepatitis C --inyecciones de peginterferón y rivabirina-- ya que esos fármacos producen efectos secundarios intolerables para un paciente con el hígado muy deteriorado, como sucede con las cirrosis. El tratamiento empleado en el Clínic, de 12 semanas de duración --el convencional dura un año-- se compuso de cuatro sustancias que bloquean los accesos del virus de la hepatitis C a las células sanguíneas: un inhibidor de la proteasa, otro de la polimerasa, ribavirina y un cuarto denominado NS5A. Los resultados han sido publicados por la revista científica The New England Journal of Medicine .

"Las ventajas de este tratamiento son múltiples --aseguró Forns--. Se administra por vía oral, no tiene efectos secundarios y proporciona el mayor índice de curación conseguido hasta ahora". La terapia convencional contra la hepatitis C, en la que predomina el interferón, tiene como consecuencia colateral la aparición de anemia, erupciones cutáneas, insomnio y depresión.

El perfil de los pacientes tratados en el Clínic correspondió, de forma mayoritaria, a hombres de 55 a 65 años que sufrieron el contagio de hepatitis C a través de una transfusión sanguínea no controlada --así sucedía hasta los años 80-- o por consumir drogas inyectables compartiendo jeringuillas con otro infectado.

COSTOSO Y CONVENIENTE Al tratarse de un cóctel de fármacos en experimentación, la nueva terapia contra la hepatitis C no ha sido incorporada a la facmacopea financiada por el Sistema Nacional de Salud. El coste del tratamiento, de unos 60.000 euros por paciente, podría retener esa autorización, si bien, advirtió Forns, "a la larga resultará conveniente económicamente", ya que la atención de los enfermos de hepatitis C, en especial cuando sufren complicaciones, precisan un trasplante hepático o desarrollan cirrosis --lo que ocurre a un 20% de los enfermos-- es mucho más costosa. La Agencia Española del Medicamento negociará un precio, ajustado, con la industria.

La terapia antiviral experimentada en el Clínic inicia una renovación, que proseguirá, en el tratamieto de la hepatitis C, anuncian los hepatólogos.