El servicio de atención del cáncer de mama del Hospital Clínic ha incorporado una pequeña gammacámara de quirófano que permite al cirujano observar tumores diminutos, invisibles al ojo humano y no palpables, y precisar la porción de tejido que debe extirparse. El recurso, explicó Gabriel Zanon, responsable de la unidad, supera en precisión a los sistemas actuales.