Es uno de los colmos del lujo: poner a un gran chef no en su mesa, sino en su propia cocina. Es algo que está ocurriendo en Estados Unidos. Y aunque hay circunstancias --y, sobre todo, costes-- que impiden que se trate de un fenómeno de masas, está de moda. Por fiestas de aniversarios, en ocasiones especiales o como regalo de cumpleaños, cada vez más cocineros estrella visitan en persona lujosos fogones de no menos lujosas casas particulares. Y por precios que pueden superar los 1.600 euros por comensal, uno puede no sólo disfrutar de las creaciones de los maestros, sino del arte de verlos crear.

"A la gente le encanta la idea de que el chef vaya hasta ellos, pero es un empeño extraordinario hacer estas fiestas. Replicar en casas particulares lo que hacemos en los restaurantes --la precisión, la perfección-- es un reto enorme y consume mucho tiempo", explica en The New York Times Tomas Keller, el chef de Per Se y el único estadounidense con tres estrellas en la primera guía Michelin de Nueva York.

Desde la oficina de Daniel Boulud --chef biestelar, responsable de cinco restaurantes en EEUU-- se asegura que las visitas en persona son excepcionales.

El proceso de las comidas a domicilio es similar para todos los maestros. Una vez que se acepta el encargo se empieza con una visita a la casa, semanas antes del festín. "Hay que comprobar la cocina, el equipamiento, y quizá ajustar el menú a las condiciones", explica Fargas, que añade que todo está determinado por el número de invitados.

MODA CONTINUISTA Con su tono zen pero certero, Antonio Miró abrió ayer la nueva Pasarela Barcelona. El diseñador presentó su colección masculina, que llegó con eslogan: que los hombres dejen el traje y se pongan americana (corta) y pantalón (ancho y desconjuntado). Osadías, las justas: puñetazos de lila y fucsia, y bermudas con calentadores. Totón Comella (TCN) contó con la top Eva Herzigova, que abrió el desfile con un vestido-viso. Y tras él, llegó un goteo de prendas de lencería que llevan esa mirada vintage de Comella. La nota amarga la puso Hannibal Laguna. El alicantino dijo que igual no desfilaría más en Barcelona.

VOLVER A EMPEZAR Tras la reboda de Eminem, en Hollywood se ha instaurado la moda de dar una segunda oportunidad al amor. Siguiendo al rapero, que se casó la semana pasada con su exmujer, Hillary Swank ha anunciado que intenta salvar su matrimonio con Chad Lowe. La actriz, que anunció que iba a divorciarse, dijo el lunes que su relación "aún no ha terminado".

MANSION MILLONARIA Jean-Marie Le Pen ha decidido poner a la venta una suntuosa mansión que posee en la periferia de París por 6,4 millones de euros, según informó ayer el rotativo satírico Le Canard Enchainé . A finales de los años 70 un empresario decidió dejar al líder ultraderechista esa propiedad, que cuenta con tres edificios de más de 300 metros cuadrados en una finca de 4.670 metros cuadrados.