Dos manifestaciones enfrentadas por el uso privado de la piscina del editor de El Mundo, Pedro J. Ramírez, han coincidido hoy sin incidentes en la playa de Sa Marjal, en Son Servera (Mallorca), con la asistencia de 300 personas contrarias a la concesión y 1.000 en defensa del periodista. Así lo ha estimado la Delegación del Gobierno en Baleares.La primera de las concentraciones se ha iniciado con un trayecto marítimo en golondrina que ha partido de Cala Rajada (Capdepera) a las diez de la mañana y ha llegado a las once a la citada playa de la Costa de los Pinos, muy próxima a la residencia estival de Ramírez.En lugar públicoSus convocantes, una veintena de organizaciones entre las que se encuentran el Lobby per la Independència y los partidos PSM, EU-EV y ERC, han protestado de este modo contra el uso privado de la piscina de Ramírez, situada en dominio público marítimo-terrestre.Separados por 300 metros y unos 60 guardias civiles, un millar de personas se han manifestado en defensa de los derechos del editor, que son objeto de un ataque por parte de una minoría radical nacionalista, a juicio de los promotores de este acto.Afiliados del PPEsta concentración ha sido promovida por el Círculo Balear, Nuevas Generaciones del PP y la plataforma Son Servera ¡Basta Ya!, y en ella se ha podido ver al expiloto de rallys y residente en la Costa de los Pinos Carlos Sainz.La presidenta nacional de Nuevas Generaciones, Carmen Fúnez, ha explicado que su organización ha querido participar en esta movilización "en defensa de los derechos individuales de las personas, sobre todo la libertad", que cree en peligro en Baleares por la actuación de "grupos radicales y extremistas".El presidente de NNGG de Baleares, Antoni Fuster, ha dicho que su organización ha movilizado a 200 afiliados de la península y 800 de las islas, entre los que se encontraba una decena de representantes de Menorca y las Pitiusas, lo que unido al resto de manifestantes sumaban un total de 2.000 asistentes, según sus estimaciones.RespetoPor otra parte, en declaraciones a Efe, Pedro J. Ramírez ha declarado sobre las manifestaciones que en ellas "no está en juego la piscina de Pedro J., sino valores mucho más importantes".Ramírez ha expresado su "respeto" por la protesta en contra del uso privado de su piscina, aunque ha explicado que este sentimiento es extensivo a cualquier "expresión pública mientras sea respetuosa con la legalidad".Algo que en su opinión no sucedió el año pasado, porque los manifestantes, entre los que se encontraba el diputado de ERC en el Congreso Joan Puig, que también participa en la protesta de hoy, "irrumpieron voluntariamente" en su domicilio, "causando daños, profiriendo insultos y obscenidades" que se vio obligado a escuchar junto a su hija pequeña."Privilegio feudal"Puig, sin embargo, justificó su presencia en la manifestación "para denunciar un privilegio de la época feudal que se le ha concedido a un señor", en alusión a Ramírez.Durante la celebración de las manifestaciones, dos avionetas han sobrevolado la playa con los lemas La costa es de todos, en defensa de las reivindicaciones contra el uso privado de la piscina, y Libertad sin ira, en un aparato con el logotipo de El Mundo.