"Creo que el problema es que estamos en manos de empresas que nos imponen sus propias normas y valores, que a veces no son las nuestras. A nosotros nos da menos reparo un desnudo que la violencia, y a ellos no", opina Nati Martínez Ribera en alusión a su caso. En la misma línea se han expresado compañeros de profesión que le han mostrado su apoyo personal como Paco Elvira, Tino Soriano y Laura Terré.

Una de las fotógrafas más reconocidas de la capital catalana, Colita, se ha mostrado completamente "indignada" y ha calificado el caso de "pura ignorancia". "¿Cómo van a comparar la valentía de una mujer que hace un trabajo positivo para ayudar a otras mujeres con la pornografía? Hay desnudos que no queda más remedio que enseñarlos. Lo que ocurre es que nos invade una ola de moralina derechista. Antes teníamos a un cura debajo de las faldas, a un guardia civil y a un juez. Y ahora tenemos al Flickr", denuncia esta veterana del sector que, entre otros galardones, atesora una Creu de Sant Jordi, la medalla al mérito artístico del Ayuntamiento de Barcelona y el premio a la comunicación no sexista del 2009.