La Audiencia de Sevilla ha condenado a 21 años y medio de cárcel a Mario Calderón Márquez por maltratar habitualmente a su mujer y matarla el 3 de junio del 2015 golpeándole en la cabeza de forma "brutal" y con "saña" con la tapa del inodoro en la casa de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) que compartían.

Tras el veredicto unánime de culpabilidad del jurado, la sección cuarta de la Audiencia ha condenado al marido a 19 años de prisión por un delito de asesinato y a otros dos años y medio por un delito de maltrato habitual a su esposa, con la que llevaba 27 años casado y con la quetuvo dos hijas, que eran mayores de edad cuando ocurrió el crimen.

La condena, a la que ha tenido acceso Efe, prohíbe al condenado aproximarse durante 33 años y a menos de 300 metros a sus dos hijas, y le impide residir en Alcalá o acudir a la localidad durante 31 años.

También se condena al hombre, de 53 años, a indemnizar con 100.000 euros a cada una de las hijas y a sufragar las costas del proceso.

Los hechos probados de la sentencia indican que antes de las 02.00 horas del 3 de junio de 2015, en el domicilio familiar, el condenado se dirigió a su esposa y, con la intención de causarle la muerte, le clavó primero hasta tres veces una navaja en la zona superior izquierda de la espalda.

Aunque la mujer buscó refugio en el cuarto de baño, el condenado le golpeó varias veces con la tapa de la cisterna de un inodoro en la cabeza, causándole un traumatismo craneoencefálico que determinó su muerte pocos minutos después.

El ataque a su esposa se produjo de forma "sorpresiva e inesperadapara ella", quien no pudo defenderse "de forma mínimamente eficaz por lo inesperado y violento del ataque, así como por los medios empleados", explica la sentencia.

Los golpes se produjeron incluso cuando la víctima ya agonizaba en el suelo, como expusieron los médicos forenses que hicieron la autopsia.